Así comenzó la batalla: 23 de Agosto de 1937
Hacia las once de la noche, algo llamó la atención del centinela que estaba de guardia. Corriendo, el soldado fue a comunicárselo a su superior. ―Sargento Galé; creo que he visto luces por la loma del Cornero. ―¿Qué luces va a haber por aquel lugar? Serán las estrellas. ―También me ha parecido oír relinchos de caballos y voces ―insistió. ―Vamos a ver ―dijo Ángel que como cada noche después de dar la vuelta de inspección, acababa de dejar durmiendo en el refugio al alférez. No